domingo, 16 de marzo de 2008

Soy asexual

¡Sí!, y lo digo con el mentón elevado y la mirada desafiante, a quién... no lo tengo claro, pero lo que si que tengo clarísimo, es que estoy harto, harto de que éste mundo gire alrededor de la cópula, harto de que la frivolidad impere en las relaciones sentimentales o espontáneas, de lo fácil que resulta manipular tan sólo con ciertas frases preestablecidas y ciertas actitudes predispuestas para la seducción del sexo opuesto.
¡No juego! ya está, si hubiese un tablero de ajedrez delante mía lo tiraría, si tuviéramos una pelota la pincharía, si tuviera una cara la besaría y si tuviese una mente me lo pensaría.
Así que digo, desde aquí, con su gran afluencia de gente, un medio tan frecuentado como lo puede ser una hoja mal fotocopiada tirada en cualquier charco del borde de la carretera, que proclamo mis principios como asexual, a partir de hoy elegiré mis propias canciones y mis propios símbolos, eligiendo principalmente un color, para que me represente a mí y a mi gente.
La primera canción que me viene a la mente es... Nina Simone con su "Ain´t got no", y como segunda y MÁS importante, con énfasis en el acento, ésta:

domingo, 9 de marzo de 2008

La verecundia

¡Hola! Pequeños amigos, ávidos buscadores de lo innecesario, y gentes de redes en general. En mi primera entrada (sin prisa pero sin pausa), me he parado a pensar en algo que todos hemos sufrido alguna vez, que todos recordamos, y que está tan terriblemente relacionado con la comunicación, como olvidado de su importancia: la vergüenza.

¿Quién no ha evitado hacer algo por vergüenza, y al revés, ha terminado realizando la más grande tontería por vergüenza? Dejamos de ser nosotros mismos y nos convertimos en conejillos asustados que intentan escapar de un depredador invisible; y no hay sitio donde esconderse, porque incluso eso es peor.

En la edad media existía el escarnio público por muchísimas razones, desde el terreno legal, hasta el religioso. Si tenéis algún problema para imaginar lo que puede llegar a ser este tipo de castigo, pensar en la difusión de las caras y nombres de pederastas o la más extrema lapidación de hoy en día en algunos países árabes…

Y el problema que trae consigo la vergüenza, viene ligado a lo que viene siendo la posición de una persona dentro de un círculo, y qué tipo de círculo sea ese. Me explico, si estas con tus amigos, te quitas los zapatos y aparece un “tomate” en el calcetín, puedes pasar un mal rato, o tomártelo con humor; pero si por ejemplo, eres el responsable de, digamos, el banco mundial, la situación es realmente extrema. Fíjense con que aguante se mira los pies…

Precisamente se dice que el humor es como una venda que se crea para protegernos de estas situaciones de vergüenza y ansiedad sociales, ya demás nos ayuda a quedar como personas inteligentes y con clase. Ahí queda eso.

En próximas entregas, mas vergüenza, mas absurdo, y probablemente mejor calidad.

La cita del post!!!: cuando los que mandan pierden la vergüenza, los que obedecen pierden el respeto (Georg Christoph Lichtenberg)